BCI es una iniciativa internacional de múltiples partes interesadas que pretende reducir el impacto medioambiental y social negativo de la producción de algodón y hacer más seguro el futuro del sector mediante la unión y la actuación conjunta de muchas partes interesadas, desde los productores hasta los minoristas. Para lograr este objetivo, el planteamiento de BCI consiste en mejorar continuamente las prácticas agrícolas dotando a los agricultores de los conocimientos, técnicas y herramientas necesarios. Esto permite a los agricultores producir de acuerdo con las normas reconocidas internacionalmente sobre el uso de pesticidas, el uso eficiente de los recursos hídricos, la mejora de la salud del suelo y la mejora del bienestar de los trabajadores agrícolas.